El PSOE se niega a bajar los impuestos, como el PP plantea, e impone una bajada en las inversiones mientras aumenta el gasto político.

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El PSOE de Càlig vetó ayer la propuesta del Partido Popular para rebajar el gasto político en el ayuntamiento y ayudar a las asociaciones locales y el tejido productivo del municipio.

Lo hizo en el seno del debate para la aprobación de los presupuestos de 2024 en el que, tal y como detalla la portavoz del PP, Candela Anglés, se aplica una bajada injustificada de las inversiones mientras el gasto político sufre un aumento considerable.

La propuesta que defendió Anglés planteaba recortar el gasto asignado a los grupos políticos para destinar estos fondos a las asociaciones del municipio. Asimismo proponía reducir nueve mil euros la asignación de la alcaldesa para destinarlo a incentivos al comercio local.

Ambas propuestas, junto a cinco enmiendas registradas por el PP con la debida antelación, fueron rechazadas por el Partido Socialista "en una muestra más de imposición y falta de diálogo".

Tampoco aceptaron el planteamiento hecho desde las filas populares para mejorar la vida en el municipio con los fondos aprobados por la Diputación Provincial de Castellón a través del Plan Impulsa.

"Somos los representantes de un gran número de vecinos que consideran que hay otra forma de gobernar", ha manifestado Candela Anglés. "Y por este motivo vamos a seguir defendiendo nuestras ideas con el deseo de que se sumen a un proyecto que es el mejor para el pueblo y es el único que guía nuestras acciones".

En este sentido, Anglés ha manifestado su deseo de "trabajar en beneficio del conjunto de la población, pero para eso hace falta diálogo y participación, algo que echamos a faltar y mucho en este equipo de gobierno socialista".